Cada día
el ir y venir
el llenar el tanque de gasolina
para tirarnos a la suerte del peso.
Entre ese ir y venir
el sudor quema la ganancia
los sueños se quedan estacionados en las esquinas
y al terminar el día
luego de comer una empanadilla
fría,
resulta que nada ha sobrado
no da ni para comprar
y volver a coser el botón
que se nos ha volado.
Y así vamos al otro día
vistiendo con disimulos
tapando lo inevitable
lo que el ir y venir
y la quemadura de esfuerzos
nos ha premiado
con ganancias vacías.
Es nuestro karma, gloriosos los gorriones.
ResponderEliminarAbrz.
Gloriosos los gorriones
Eliminarque se dejan vestir día a dia por su Creador
mientras nosotros intentamos llenar el bolsillo con el pan del día,
Dichosos los gorriones que se dejan vestir día a dia
Que bofetón.
Abrazos.
Algunos días son más que eso, la lástima es que sólo sean algunos y no todos.
ResponderEliminarUn beso.
Dichosos los conformes
Eliminarporque ellos no pedirán mas que eso.
Besos
Ay momentos que cuanta razón llevas. Todo el día corriendo y al final no queda nada en la nevera y además hay que volver a coser el botón.
ResponderEliminarEs una entrada preciosa.
Es tan triste
Eliminartrabajar el día entero
y al final
no recoger nada.
Volver a coser el botón
o poner parcho en la piel.
Gracias Tecla
por compartir estos momentos conmigo.
Yo ya me he cansado de ese ir y venir.
ResponderEliminarDejo que lo haga mi cuerpo.
Mi alma vive otra vida.
Besos.
Yo estoy en lo mismo.
EliminarYa hay cosas de esta vida que me cansan.
Son mis hijos los que me empujan a seguir.
Besos
Gracias por tu estar en este blog.